22 Gener 2017

UN TROPEZÓN NO ES CAÍDA

Debut en la Categoría Nacional Catalana con un resultado al que el Club d'Escacs Platja d'Aro no está para nada acostumbrado: hemos caído de forma inapelable en el derby del Baix Empordà ante nuestro club vecino y amigo Guixolenc. Es la primera vez, en nuestra quinta temporada de competición (desde la fundación del club en el 2013) que el Platja d'Aro cae derrotado en un match en la liga regular.

Las cosas no pintaban bien antes del match y nuestros peores temores se hicieron realidad. Dos bajas importantes en los tableros de arriba (Felipe Tosán y Ángel Castellanos) y un único refuerzo foráneo, el GM estoniano Volodin. Aunque midiéndolo teóricamente por los ELOs teníamos una pequeñísima ventaja, enseguida el match se nos puso muy cuesta arriba.

Kuche se dejó un mate en dos en una posición teóricamente igualada. Y del 0-1 veíamos que se nos acercaba el 0-2 casi con toda seguridad ya que Rodrigo había quedado perdido tras la apertura. Las esperanzas pasaban por la partida de David, con un peón cómodo de más, la del presi Vladimir que también tenía un peón de ventaja (aunque en este caso los alfiles de distinto color auguraban unas posibles tablas), la de un servidor que disponía de una cómoda ventaja posicional, y de mis compañeros Didier y Jordi a quienes yo les veía buenas posiciones. Josep Font en el tablero 10 contaba con un peón de menos pero parecía resistir, y Juan estaba igualado con el presi del Guixolenc. Y mientras, en el tablero 1 nuestro GM sufría frente al fortísimo Joaquim Fons.

No obstante, todo se torció definitivamente poco después. El presi hizo tablas y Rodrigo perdió, lo cual entraba dentro de lo previsible, pero la debacle inesperada ocurrió en los tableros 3 y 4. Didier se quedó clavado más de media hora en un determinado momento y acabó entregando dos piezas por torre, llegando a un final sin esperanzas, y Jordi omitió alguna jugada defensiva de su adversario mientras atacaba al mejor estilo Tahl. Un 0.5-4.5 ya nos dejaba prácticamente al borde del abismo, y aunque David asegurara su ventaja con buena técnica y sumara el descuento, al que hubo que agregar mi trabajada victoria, apenas nos servía para acercarnos en el marcador a 2.5-4.5. Poco duró la alegría ya que la derrota de nuestro primer tablero (impresionante Joaquim Fons, matador de gigantes) decantó definitivamente la balanza a favor del Guixolenc.

En tablas acabaron las dos partidas restantes, Juan Sánchez frente a Josep Ribera y Josep Font frente a Jordi Serra. El resultado final fue de derrota por 6.5 a 3.5. Un resultado que a priori puede parecer sorprendente pero visto lo visto fue indiscutible.

Nuestro grupo de whatsapp se debatía entre la sorpresa y los ánimos dados por el presi Vladimir, que “aún quedan ocho rondas” y los del hoy ausente Felipe Tosán, que “un tropezón no es caída”. Puestos a perder algún match, mejor hacerlo frente a nuestros vecinos, que aspiran a la permanencia, mientras nosotros seguimos pensando, pese a la derrota, en el ascenso a 1ª división.

La semana que viene nos desplazamos a Llinars del Vallès a enfrentarnos al joven equipo de la localidad vallesana, y está claro que no podemos permitirnos más fallos si pensamos mantener intactas nuestras aspiraciones.

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